domingo, 12 de diciembre de 2010

Recuperacion de la Fe...


“Tened fe de Dios. En verdad os digo que cualquiera que digiera a ese monte: levántate y échate al mar, y no dudara en su corazón, más creyere que se hará cuanto dijere, todo le será hecho. Por tanto os digo que toda las cosas que pidierais orando, creed que las recibiréis y os vendrán” (Marcos, 10, 22-24)

En la dramatización (metodología base del psicodrama) la escena conflictiva se libera y puede expresarse no solo por la palabra, si no también por el gesto, la postura corporal, la postura en el espacio de los objetos, etc. donde estos elementos, al igual que en el sueño, están llenos de significado.
Todo surgimiento psicodramático es producto de la escena conflictiva pasada, la cual, a partir de un proceso de caldeamiento, reaparece en el “aquí y ahora” como un acto de recuperación de memoria emotiva que resuelve una negación o una represión defensiva. Esa negación o represión, se habría marginado de la conciencia del protagonista, y el proceso de caldeamiento permitiría su reactivación (Menegazzo, C).
Para el psicodrama el protagonista es quien tiene sus propias verdades y éstas se encuentran en él de forma latente. Si el protagonista evita encontrarse con estas verdades el trabajo del psicodramatista será facilitar este encuentro, debido a que el trabajo se dirige al fortalecimiento del yo y la ampliación del campo de la conciencia. En este sentido, Dalmiro Bustos plantea que después de una sesión en la que se han trabajado aspectos desconocidos para el sujeto (donde ha comprendido el porqué y/o para qué de muchas conductas hasta entonces inexplicables), surge una necesidad de replanteos secundarios. El sujeto parte con un insight que le permite comprender y comenzar un cambio; pero luego se inician reflexiones y se descubren aspectos del mundo que hasta ese momento ignoraba.
La psicoterapia psicodramática propone una re valoración de lo consiente accediendo a lo inconsciente, pero sin pensarlo como único sistema de comunicación. Moreno considera que  los estados inconscientes son aquellos que los participantes han experimentado y construido conjuntamente y que por lo tanto, solo pueden ser reproducidos o representados de esta misma manera (coinconciente).
Los procesos llamados Conscientes, son aquellos que pueden ser traídos a la conciencia sin esfuerzo, tan sólo con el estímulo adecuado; y por último, los llamados Mecanismos de Defensa; que pueden entenderse como otra categoría de los procesos inconcientes y su finalidad es controlar los niveles de ansiedad, para hacerla soportable para el yo y decodificable para la conciencia. (Lazo, I.; Konow, C.; Vejar, M. 2005)
Considerando estos conceptos y procesos, al dramatizar, el sujeto se convierte en un representante en acción de todo el grupo, así los aspectos de cada integrante, se evocan en la dramatización. Una vez que finaliza la dramatización, aparecen aquellos aspectos proyectados durante ésta, con el consiguiente enriquecimiento de todos los integrantes. La atmósfera es de una emoción profundamente compartida. Como refiere Menegazzo, el acto de catarsis de integración, de comprensión, puede ser un verdadero salto existencial, no solo a un nivel individual, sino que también a un nivel grupal. Se trata de un salto coexistencial, un acto múltiple y compartido. A partir de una psicodramatización y del proceso de comprensión e integración de una escena, todo el grupo cambia.
Desde la dramatización de las escenas individuales a la producción de escenas grupales, se teje una red de articulación de las diferentes subjetividades. Las dificultades y posibilidades de cada uno; se presentan, se recrean, se vuelven a experimentar en el aquí y ahora del grupo, poniéndose a prueba en su consistencia y posibilidades de transformación. Al iniciarse la actividad del grupo se actualizan situaciones también grupales, del presente y pasado, que operan como referente de inserción para cada integrante (Rothamn. A, 1990).
Las posibilidades de libertad, espontaneidad y creatividad que un protagonista logra en el proceso psicodramático, movilizan además las posibilidades de todos los integrantes del grupo terapéutico.
En el proceso terapéutico, el dispositivo del psicodrama es generar un espacio escénico en que se produce un imaginario, dentro del cual, lo que importa son las fantasías internas desplegadas por el paciente. En este espacio, éste tiene la oportunidad de establecer una realidad suplementaria, a partir de la cual se pueden llevar a cabo acciones, verbalizaciones y expresión de emociones importantes para la cura psicodramática, pero que no fueron realizados en la escena original real. (Reyes, 2002)
En algunas ocasiones, en especial en los casos que se trabaja con yo más débiles como es el caso de los psicóticos o niños quienes aún no lo han estructurado firmemente, se utiliza objetos intermediarios que permitan la proyección de todos los mecanismos defensivos en él, a su vez de las emociones que son rechazadas por la conciencia. De esta forma poder finalmente reparar a través de él. (Reyes, 2002)
Además, durante este proceso el terapeuta va desplegando distintas funciones, tales como contención, estimulación y el compartir frente al paciente. Además, durante este proceso el terapeuta va desplegando distintas funciones, tales como contención, estimulación y el compartir frente al paciente. Es así, como el vínculo terapéutico se va conformando a través del paso por los distintos clusters.
Hay múltiples dimensiones que se dan en la relación terapéutica, la cual toma en cuenta parámetros espaciales, temporales, áreas involucradas, referencias al individuo, al grupo o a la sociedad utilizando la acción o la palabra. Para esto es importante considerar el proceso longitudinal y transversal en que se da la relación. El aquí y el ahora y la historia que se actualiza en esta dimensión.
Con respecto al espacio, la configuración de éste es de suma importancia en psicoterapia, ya que prepara al protagonista para que sea él mismo y actúe en un ambiente que reproduce aquel en el que vive. De esta manera, pueda en este espacio resignificar e ir gradualmente reordenando su historia traumática. Para la resignificación y reordenamiento de la experiencia traumática , es necesario que en el vínculo terapéutico se concretice la acción, la palabra y el sentimiento, asociado a tal experiencia.
Otra dimensión a considerar es la de individuo, grupo y sociedad. Desde estas dimensiones, es relevante, que en el asumir una experiencia dolorosa en el vínculo terapéutico, se comprenda el significado personal e íntimo de ese dolor, pero que además se trascienda el sentido familiar, colectivo y cultural que ha adquirido dicha experiencia dolorosa.
El método psicodramático, permite que sea el propio paciente quien vaya construyendo el camino al insight. De esta forma, permite la co-construcción ideo afectiva del individuo y la resignificación del vínculo.

             El proceso terapéutico va de lo más superficial a lo más profundo, donde están presentes momentos básicos dentro de la terapia. En un comienzo, a través del caldeamiento prepara a la persona para que se encuentre en una posición óptima para la acción, luego viene la dramatización que es la realización de la acción, generalmente a través de la dramatización del conflicto.

Psicodrama, otra cara del Arte Terapia


Dentro de lo que se conoce como Arte Terapia, se encuentra una disciplina que es fundamental para la realización de procesos catárticos. El Psicodrama, disciplina que permite la expresión de una emocionalidad relacionada al contexto en el que ocurre y realizar intentos casi in situ para remediar efectos nocivos a la emocionalidad de quien las experimenta.
Todo lo que es importante a lo largo de muestra vida, lo aprendemos a partir de la observación, del ensayo de respuestas generadas por la elaboración interna que realizamos acerca de la experiencia, de lo que hemos vivido. Los roles de género no son una excepción y lo diferenciamos del rol ligado al sexo, estando el primero relacionado con las categorías sociales y las expectativas de conducta del colectivo respecto a las funciones y definición que hace de hombres y mujeres, y el segundo con necesidades de relación y encuentro con el otro.
Se ha demostrado que el trabajo en el ámbito del clima y las interrelaciones educativas, son iniciativas que han tenido mayor impacto en el desempeño de los estudiantes; lo cual reafirma que las intervenciones se sitúen en éstos ámbitos. Estos resultados, nos llevan a pensar que la educación necesita de un proceso de autoconocimiento guiado, de una reeducación emocional, que implique cambios de conducta que involucren y responsabilicen a toda la comunidad educativa, llámense profesores, padres, docentes y estudiantes. Esta nueva forma de hacer y aprehender la educación nos permitirá generar verdaderos procesos de transformación educativa y emocional.
El trabajo psicodramático persigue la implicación de todos los asistentes: todos ellos, por su participación activa e inmediata o mediatizada en la observación de quienes escenifican, van a obtener, en condiciones idóneas, un beneficio terapéutico. El efecto terapéutico pasa por el propio trabajo personal y por la identificación con el protagonista que trabaja. Una identificación meramente imaginaria, relativa a los rasgos y gestos de los personajes y a la configuración formal de la escena, deja la escenificación en el nivel superficial de la exhibición-observación: no hay implicación personal en el trabajo escénico.
Debido a esto, es posible considerar coherente utilizar la técnica psicodramática inserta en dicho programa y contexto, debido a que incluye intrínsecamente el contexto sociocultural de los sujetos; el tiempo y espacio en el “aquí y ahora”; permite recrear una escena en consideración con las vivencias, relaciones, historias y situaciones que se despliegan al interior de un grupo de niños (as). Al considerar la espontaneidad y la creatividad como fundamentos de la teoría, J. L. Moreno (creador del psicodrama) impulsa la capacidad de expresar y actualizar un conjunto de fuerzas, necesidades y tendencias propias de los sujetos con adecuación social, marcando una diferencia con la expresión y actuación impulsiva o violenta en sí.
Para Moreno, ser espontáneo es expresar el sí mismo de manera adecuada al contexto y el entorno social en el cual el sujeto se desenvuelve.
Todos los seres humanos estamos equipados de espontaneidad y sabemos como enfrentar una situación por primera vez. La salud mental es saber qué hacer en estas situaciones de manera adecuada, debido a que no se somete la espontaneidad y creatividad a lo socialmente estipulado (conserva cultural) sino a la expresión auténtica de las necesidades y deseos (consientes e inconscientes) de los sujetos. La adecuación tiene directa relación con el actuar desde adentro (sentir-se). La memoria corporal que se activa con el trabajo psicodramático, permite actualizar la acción con los movimientos, los patrones presociales, las ideas, emociones y las fantasías preverbales.
La acción frente a la palabra permite desbloquear las cadenas de significados reprimidos y así evitar las sensaciones de dolor. El lenguaje gramatical y el no verbal, permiten internarnos en el mundo psíquico de los sujetos considerándolos por tanto como sujetos históricos.
Debido a que en psicodrama, el análisis en el nivel social favorece el análisis del nivel intrapsíquico, podemos reflexionar acerca de la estigmatización y la conceptualización en conjunto con los sujetos que construyen estas realidades y por tanto, problematizar con esta reflexión los conceptos de descontrol, inadecuación y rigidez frente a las nuevas situaciones y relaciones a las que los niños (as) se ven enfrentados; sean estas escolares, familiares o personales.

Ventajas de este tipo de terapias


Marinovic plantea que la experiencia del arte tiene la particularidad de permitir integrar diversas funciones en un todo con sentido. Las principales ventajas mencionadas por diversos autores y que se describen del trabajo con arte en el proceso terapéutico, fueron resumidas por Araya, Correa y Sánchez, a continuación:
·         Terapia no verbal: El trabajo con imágenes permite expresar diversas experiencias simbólicas tales como sueños, fantasías e imágenes del pasado, sin tener que traducirlos a palabras. En definitiva se está creando un equivalente a las experiencias humanas pudiendo transformar, revivir y/o reinterpretar estas.
·         Proyección: El realizar un producto tangible, espontáneo, que no persigue un objetivo estético permite suponer que se relaciona con el mundo interno del autor, como una proyección de su experiencia de vida. Se daría objetivación de la realidad al ser la expresión artística un nexo entre el individuo y su experiencia interna.
·         Catarsis: En el proceso de expresión plástica se estimula la liberación intensa de emociones previamente contenidas. De esta manera se ayuda a abordar situaciones conflictivas sin experimentar demasiada ansiedad.
·         Integración de opuestos: En el proceso creativo se expresan polaridades del creador, lo que permitiría la integración de estas.
·         Disminución de las defensas: El arte es un medio menos utilizado que el lenguaje y por lo tanto es menos susceptible de controlar, de esta manera salen a relucir cosas inesperadas.
·         Integración del mundo interno y externo: El creador debe relacionar sus sentimientos e impulsos internos con las impresiones externas, de esta manera estaría ordenándose y descubriéndose a sí mismo y a su entorno desde una perspectiva diferente y novedosa.
·         Permanencia: La obra creada conlleva una experiencia, es por esto que se puede revivir los sentimientos que se tuvieron al crearla, con solo mirar la obra.
·         Prototipo de un funcionamiento sano: Con la expresión plástica se promueve un comportamiento sano que estimula la expresión de sentimientos, la disminución de las defensas rígidas, la integración de la realidad interna y externa, etc. De esta ma nera, lo logrado en la terapia se puede extender a otras áreas en la vida del paciente y la Experiencia gratificante: La experiencia creativa es gratificante en sí, lo que lleva al paciente a motivarse con el proceso terapéutico.

Orientaciones, Metodos y Tecnicas


El Arte Terapia abarca un amplio espectro de aplicaciones, ya sea en las áreas de rehabilitación, educación o salud. A continuación se analiza mayormente el espectro relacionado con la salud mental En el estudio de las diversas corrientes se encuentran dos de considerable importancia, la primera enfocada hacia el lado psicoterapéutico, la segunda hacia el lado artístico. En E.E.U.U. surgen las dos primeras representantes de estas corrientes.


Margaret Naumburg inició la primera orientación (psicoterapéutica) al llevar a sus pacientes psicoanalíticos a dibujar y asociar libremente. De esta manera ella encontró una forma de comunicarse que iba más allá del puro lenguaje. Bajo este enfoque la expresión plástica es un complemento al lenguaje verbal, que ayuda a lograr el insight. Por otro lado Edith Kramer se inclinó hacia el lado artístico, al darle mayor importancia al proceso creativo y curativo del arte. Hablaba Kramer de la sublimación artística, donde el arte permitiría una integración de las energías canalizadas en el objeto artístico. Ambas autoras antes mencionadas trabajaron con una orientación psicoanalítica. Más adelante Harriet Wadeson trabajaría una orientación existencialista donde el paciente sería responsable de sí mismo y la terapia a través del arte sería un medio para darle sentido a la vida. Desde la perspectiva de Wadeson no importa el resultado sino más bien el análisis y reflexión verbal después de la creación. En Inglaterra surgió este tipo de terapia proveniente del lado artístico con Edward Adamson, trabajando en un hospital Psiquiátrico en 1946. Adamson utilizó el arte y el proceso creativo natural en el ser humano, como sanador e integrador de la personalidad. Desde este punto de vista se le da mayor poder al arte como sistema autosanador. Otras corrientes observadas en Arte Terapia son de orientación sistémica, de integración teórica, psicoeducativa, cognitiva y conductual.


Se debe definir si se enfoca la terapia desde un punto de vista psicoterapéutico o psicoeducativo. El enfoque psicoterapéutico se concentra en la relación y en el desarrollo de sí mismo al promover la autoexpresión, reflexión y relación de lo interno con lo externo. El enfoque psicoeducativo se concentra en el aprendizaje, llevando la terapia a la adquisición de habilidades o cambio de conductas.


·         Se puede hablar de tipos de intervención de acuerdo a su profundidad. Hills describe tres niveles desarrollados por Cawley. Estos son de sostén, intermedio y exploratorio. El primer nivel, de sostén es también llamado de apoyo. Esta terapia es corta, no dura más de 20 sesiones. Se centra principalmente en la autoestima, las funciones del ego y las habilidades adaptativas. El terapeuta buscará reducir la ansiedad y la frustración que surjan en el proceso. Este es el tipo de intervención que se pretende utilizar en vista del tiempo con el que se dispone para trabajar. Además, si bien el sentido es psicoterapéutico, al momento de mostrar los resultados pretende entregarle un enfoque psicoeducativos ya que el producto de este trabajo pretende estar al servicio de las necesidades de la comunidad educativa.


·         El segundo tipo de intervención es intermedio. El terapeuta puede reconocer la contratransferencia, discriminando lo propio y lo del paciente.


·         El tercer nivel, exploratorio, los beneficios nacen de una mayor madurez, del insight  o de la resolución del conflicto intrapsíquico. Este puede durar años. 




          Se puede realizar una terapia de modo directivo o no directivo. El sistema directivo es estructurado, el terapeuta dirige la actividad que se realizará y los materiales que se utilizarán de acuerdo a los objetivos de la terapia o de la sesión. La terapia no directiva por su lado permite una creación libre donde el paciente escoge los materiales, temáticas y técnicas que usará sin una estructura preestablecida. Dentro de estas dos técnicas encontramos matices, como técnicas semi–directivas o cambios de directivo a no directivo y vice versa dentro de una misma terapia.

Fundamentos de proceso Arteterapeutico

Dalley (1987), plantea que el Arte Terapia se considera como el uso del arte en un contexto terapéutico, siendo lo más importante la persona y el proceso, donde el arte se utilizaría como un medio de comunicación no verbal.
Birtchnell por su parte, ratifica lo dicho por Dalley al decir que; dentro de los objetivos del Arte Terapia se trata más que de lo representado en sí, de la forma en que se ha hecho y el cómo se describe lo que se ha representado. Wood confirma la importancia del proceso al decir que el arte terapia involucra no solo la producción artística sino que también el proceso de elaboración. Se ha hablado de cambiarle el nombre de “arte” a lo elaborado en esta terapia, puesto que el término implica un juicio de valor estético en un contexto donde no es la prioridad, puesto que lo importante es el proceso y su relación con procesos psicológicos, más que el valor estético del producto. Al respecto Ulman dice que las proyecciones espontáneas estimuladas por la terapia artística no son propiamente arte, sino fragmentos vitales de la materia prima de la cual el arte puede evolucionar.
Taverne define el Arte Terapia como un placer y a la vez como un juego, en el cual se busca experimentar con sensaciones y sentimientos que se generan en la persona a partir del material que ha creado. Como lo buscado sería la esencia de la persona, lo más importante es lo que ella vive y “ve” en su creación. Es importante destacar que algunos arte-terapeutas le dan mucha importancia a la obra o producto artístico, diciendo que el arte es un fin en sí mismo, que refuerza el yo incentivando el crecimiento, sin embargo no dejan de lado el promover la capacidad expresiva artística que coopera con el proceso de crecimiento psicológico.

¿Que se entiende por Arte Terapia?


Arte terapia es definida como una profesión en el área de la salud mental que usa el proceso creativo para mejorar y realzar el bienestar físico, mental y emocional de individuos de todas las edades. Se basa en la creencia de que el proceso creativo ayuda a resolver conflictos y problemas, desarrolla habilidades interpersonales, manejo de la conducta, reduce el stress, aumenta la autoestima y la auto conciencia y se logra la introspección.


El arte terapia es definido por la Asociación Británica de Arte Terapeutas como una forma de psicoterapia que usa el medio artístico como su forma primaria de comunicación. Los clientes que son derivados a Arte Terapia no necesitan experiencia previa o formación en arte, el arte terapeuta no está llevado a hacer diagnóstico o asesoría estética de la imagen del paciente. En definitiva se busca capacitar al cliente a efectuar cambios y crecimientos en un nivel personal a través del uso de materiales artísticos en un entorno protegido y facilitador.

          Arte Terapia según la Asociación Chilena de Arte Terapia es una especialización profesional que utiliza la expresión plástica como medio de comunicación, para explorar y elaborar el mundo interno de los pacientes en el proceso psicoterapéutico, con fines educativos y de desarrollo personal.